La Huelga Nacional Indefinida (HNI) emprendida desde el 20 de junio nos permite extraer a la fecha las siguientes CONCLUSIONES y TAREAS de urgente realización que el CONARE SUTE LIMA plantea al magisterio peruano de cara al futuro:
PRIMERO: MAGISTERIO RECHAZA LEY CONSENSUADA.
Los maestros no luchan por la "ley consensuada", este planteamiento no tiene carácter nacional y sólo fue promovido por la cúpula partidaria (René Ramírez, Julio Mendoza García, Carlos Rojas Galarza, etc.) Sin respaldo alguno en las bases y regiones del país. Hoy, René Ramírez y los antes mencionados, conocidos asalariados de la Derrama Magisterial, han callado este tema confirmando que este tipo de tretas fue apuntalado por la cúpula partidaria para confundir y dividir al magisterio. Los hechos confirman que el centro de gravitación de la lucha huelguística gira alrededor de la defensa de la Ley del Profesorado Ley 24029 y la defensa de los derechos remunerativos allí consagrados. En esa perspectiva urge continuar dar la batalla por la defensa de la Ley del Profesorado frente a la estructura legal neoliberal montada por las clases dominantes en el país.
SEGUNDO: RETOMAR EL CARACTER DE FRENTE UNICO DEL SUTEP.
La HNI ha confirmado que en Lima, Callao y otras regiones no hay trabajo sindical, salvo algunas excepciones. El control partidario en Lima y Callao sobrevive en base a la desorganización y el desmantelamiento sindical, condiciones útiles para la sobrevivencia del burocratismo sindical largamente enquistado en el sindicato. El SUTEP es esencialmente una cáscara sin contenido, sin la capacidad de organizar y dirigir una lucha del nivel de una HNI. Sus sucesivas "jornadas nacionales de protesta" y "paros nacionales" no han impedido en los últimos 20 años la avalancha de agresiones contra el magisterio y la educación pública. Sus propios "dirigentes de base" no han acatado el paro del último 12 de julio. Reorganizar los SUTE base y retomar el carácter de Frente Único dotándolas de dirección sindical clasista, es la próxima gran tarea.
TERCERO: OPONER SINDICALISMO CLASISTA AL SINDICALISMO COLABORACIONISTA.
El modelo neoliberal ha coaptado al burocratismo sindical convirtiéndolo en su más fiel colaborador, al cederle cuotas de poder (Derrama Magisterial) y alcanzar su autosilenciamiento. Este sindicalismo ha renunciado a la defensa de los derechos de los trabajadores y, en cambio, se desvive por defender su cuota de poder patrimonial. La cobarde adjetivación de la HNI por parte del CEN SUTEP (PATRIA ROJA), calificándola como "senderista" y "pro-Movadef", no resulta gratuita ni es política; es en lo fundamental una conducta policíaca, contraria a la moral de la clase trabajadora. A través de sus voceros de turno (René Ramírez), la extrema derecha agita la represión cumpliendo su rol colaboracionista mientras desnuda su incapacidad para emprender luchas de mayor envergadura. Para los colaboracionistas "hay que esperar las condiciones" o "no están dadas las condiciones" o "hay que esperar que las condiciones maduren" para emprender una lucha del nivel de una HNI, pretexto que esgrimen con el objeto de castrar la capacidad protagónica y hacedora de la clase trabajadora y de su vanguardia. El colaboracionismo resulta así funcional, útil a los intereses de los poderosos.
CUARTO: ELECCIONES UNIVERSALES, DESDE LAS BASES HASTA EL CEN.
PRIMERO: MAGISTERIO RECHAZA LEY CONSENSUADA.
Los maestros no luchan por la "ley consensuada", este planteamiento no tiene carácter nacional y sólo fue promovido por la cúpula partidaria (René Ramírez, Julio Mendoza García, Carlos Rojas Galarza, etc.) Sin respaldo alguno en las bases y regiones del país. Hoy, René Ramírez y los antes mencionados, conocidos asalariados de la Derrama Magisterial, han callado este tema confirmando que este tipo de tretas fue apuntalado por la cúpula partidaria para confundir y dividir al magisterio. Los hechos confirman que el centro de gravitación de la lucha huelguística gira alrededor de la defensa de la Ley del Profesorado Ley 24029 y la defensa de los derechos remunerativos allí consagrados. En esa perspectiva urge continuar dar la batalla por la defensa de la Ley del Profesorado frente a la estructura legal neoliberal montada por las clases dominantes en el país.
SEGUNDO: RETOMAR EL CARACTER DE FRENTE UNICO DEL SUTEP.
La HNI ha confirmado que en Lima, Callao y otras regiones no hay trabajo sindical, salvo algunas excepciones. El control partidario en Lima y Callao sobrevive en base a la desorganización y el desmantelamiento sindical, condiciones útiles para la sobrevivencia del burocratismo sindical largamente enquistado en el sindicato. El SUTEP es esencialmente una cáscara sin contenido, sin la capacidad de organizar y dirigir una lucha del nivel de una HNI. Sus sucesivas "jornadas nacionales de protesta" y "paros nacionales" no han impedido en los últimos 20 años la avalancha de agresiones contra el magisterio y la educación pública. Sus propios "dirigentes de base" no han acatado el paro del último 12 de julio. Reorganizar los SUTE base y retomar el carácter de Frente Único dotándolas de dirección sindical clasista, es la próxima gran tarea.
TERCERO: OPONER SINDICALISMO CLASISTA AL SINDICALISMO COLABORACIONISTA.
El modelo neoliberal ha coaptado al burocratismo sindical convirtiéndolo en su más fiel colaborador, al cederle cuotas de poder (Derrama Magisterial) y alcanzar su autosilenciamiento. Este sindicalismo ha renunciado a la defensa de los derechos de los trabajadores y, en cambio, se desvive por defender su cuota de poder patrimonial. La cobarde adjetivación de la HNI por parte del CEN SUTEP (PATRIA ROJA), calificándola como "senderista" y "pro-Movadef", no resulta gratuita ni es política; es en lo fundamental una conducta policíaca, contraria a la moral de la clase trabajadora. A través de sus voceros de turno (René Ramírez), la extrema derecha agita la represión cumpliendo su rol colaboracionista mientras desnuda su incapacidad para emprender luchas de mayor envergadura. Para los colaboracionistas "hay que esperar las condiciones" o "no están dadas las condiciones" o "hay que esperar que las condiciones maduren" para emprender una lucha del nivel de una HNI, pretexto que esgrimen con el objeto de castrar la capacidad protagónica y hacedora de la clase trabajadora y de su vanguardia. El colaboracionismo resulta así funcional, útil a los intereses de los poderosos.
CUARTO: ELECCIONES UNIVERSALES, DESDE LAS BASES HASTA EL CEN.
Definitivamente, el SUTEP ha sido reducido a la condición de apéndice partidario. Un sindicato así no le sirve al magisterio. Corresponde a las bases derrotar a la burocracia sindical implementando la democratización del magisterio, proceso que conlleva la esforzada tarea de reactivar los SUTE BASE Sectorales y Regionales hasta el CEN con elecciones universales bajo el principio de UN MAESTRO, UN VOTO con presencia de organizaciones de supervisión externa y ante los medios de comunicación, ejemplo de esto fueron las elecciones realizadas el 21 de diciembre pasado en el SUTE 14 Sector. Contra la dictadura partidaria, lucha democrática y defensa del Frente Único, garantía de triunfo.
QUINTO: NUEVOS CUADROS CONSOLIDAN LIDERAZGO DEL CLASISMO.
Los dirigentes surgen del proceso histórico desplegado por la clase trabajadora. No surge la dirección del contubernio, ni de las deliberaciones palaciegas. Los cuadros surgen del fragor de la lucha sindical abanderando las justas y legitimas demandas del magisterio. La HNI ha consolidado un liderazgo legitimo que hoy reconocemos con el surgimiento de nuevos y esclarecidos dirigentes en oposición a la costra de eternos dirigentes (Olmedo Auris, César Barrera Bazán, Hammer Villena, René Ramírez, etc,) sin mayor trascendencia que su vinculación con el cogollo partidario. Corresponde a estos nuevos cuadros, con apoyo de las bases, concluir las tareas de la reorientación del sindicato, de su afirmación como instrumento de lucha del magisterio peruano.
Ponemos a disposición de las bases estas conclusiones para su debate en las bases y renovamos nuestro compromiso de plasmar estas tareas.
QUINTO: NUEVOS CUADROS CONSOLIDAN LIDERAZGO DEL CLASISMO.
Los dirigentes surgen del proceso histórico desplegado por la clase trabajadora. No surge la dirección del contubernio, ni de las deliberaciones palaciegas. Los cuadros surgen del fragor de la lucha sindical abanderando las justas y legitimas demandas del magisterio. La HNI ha consolidado un liderazgo legitimo que hoy reconocemos con el surgimiento de nuevos y esclarecidos dirigentes en oposición a la costra de eternos dirigentes (Olmedo Auris, César Barrera Bazán, Hammer Villena, René Ramírez, etc,) sin mayor trascendencia que su vinculación con el cogollo partidario. Corresponde a estos nuevos cuadros, con apoyo de las bases, concluir las tareas de la reorientación del sindicato, de su afirmación como instrumento de lucha del magisterio peruano.
Ponemos a disposición de las bases estas conclusiones para su debate en las bases y renovamos nuestro compromiso de plasmar estas tareas.
Comite Regional del CONARE SUTE LIMA
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